Lectura en familia
La lectura es una actividad sencilla y accesible para realizar con un niño pequeño. Además de compartir un momento especial juntos, también aporta un gran número de beneficios inestimables para los niños pequeños:
- fomenta su curiosidad y cultiva su imaginación;
- enriquece considerablemente su vocabulario y desarrolla sus habilidades lingüísticas;
- permite la adquisición de nociones de espacio y tiempo (antes, ayer, mañana, aquí, allí...);
- enriquece sus conocimientos generales y desarrolla su empatía;
- le expone a la estructura de una historia (principio-medio-fin de una historia);
- Desarrolla la capacidad de formular y responder preguntas, ejerciendo así un juicio crítico;
- aumenta su capacidad de hacer conexiones, de desarrollar una cierta lógica;
- es una actividad más lenta que le ayuda a concentrarse y prestar atención en un momento en que todo va tan rápido a su alrededor: la televisión, los videojuegos
Una mejor lectura para un mejor éxito
1
Lee con tu hijo al menos 15 minutos al día, ¡conviértelo en un hábito diario!
Ejemplos: un momento de lectura antes de acostarse, el sábado por la mañana bajo el edredón...
2
Aprovecha la biblioteca y otros recursos culturales de tu barrio:
son fácilmente accesibles y ayudarán al éxito educativo de su hijo.
3
Tenga libros en casa y proporcione a su hijo material de escritura y lectura.
Ejemplo: lápices, papel, pegamento, etc.
4
Diviértanse juntos con los libros: es la mejor manera de transmitir a tu hijo el placer de la lectura. Tendrá buenos recuerdos de estos momentos compartidos y se convertirá en lector a su vez.
